17 - Gran Fuga: Venciendo los límites del ego.
Retirar el Peso de la Vida y Transformar el Ego.
Nosotros estamos encarcelados, y no sabemos de eso.
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Síntomas Relacionados:
Autocontrol;
Mente Cerrada;
Egoísmo;
Egomanía;
Hipocresía;
Libertad;
Paranoia;
Pesimismo.
Reflexión:
"¿Prisión?" pregunta usted. Es eso mismo. Somos rehenes de una presión constante para que sobrepujemos amigos y compañeros.
Somos prisioneros de nuestros caprichos reactivos y deseos egocéntricos. Somos esclavos de nuestras empleos y presiones financieras. Dependemos de las percepciones de otras personas a nuestro respecto. Estamos encarcelados por nuestra necesidad de aceptación por parte de otras personas.
¿Quiere liberarse? El ego es la base de todas las formas de infelicidad. Él nos compele a convencer a los demás de que estamos ciertos, hasta cuando estamos equivocados y hasta cuando sabemos que estamos equivocados.
El ego nos da la ilusión de que tenemos libertad para actuar, pero, en la realidad, somos prisioneros de sus deseos. Cuando una persona no admite tener ego, se trata simplemente del ego trabajando duro, cumpliendo su misión, patrullando los terrenos de la prisión. Si una persona es incapaz de reconocer su propio ego en alguna situación, el ego simplemente la tornó ciega y la metió en la solitaria.
El ego es una corriente con bola de hierro que nos ancla en la dimensión física y bloquea nuestra conexión con el crecimiento espiritual. Sin embargo, es solamente en el ámbito espiritual que la verdadera dicha y plenitud pueden ser encontradas.
Reflexión:
"¿Prisión?" pregunta usted. Es eso mismo. Somos rehenes de una presión constante para que sobrepujemos amigos y compañeros.
Somos prisioneros de nuestros caprichos reactivos y deseos egocéntricos. Somos esclavos de nuestras empleos y presiones financieras. Dependemos de las percepciones de otras personas a nuestro respecto. Estamos encarcelados por nuestra necesidad de aceptación por parte de otras personas.
¿Quiere liberarse? El ego es la base de todas las formas de infelicidad. Él nos compele a convencer a los demás de que estamos ciertos, hasta cuando estamos equivocados y hasta cuando sabemos que estamos equivocados.
El ego nos da la ilusión de que tenemos libertad para actuar, pero, en la realidad, somos prisioneros de sus deseos. Cuando una persona no admite tener ego, se trata simplemente del ego trabajando duro, cumpliendo su misión, patrullando los terrenos de la prisión. Si una persona es incapaz de reconocer su propio ego en alguna situación, el ego simplemente la tornó ciega y la metió en la solitaria.
El ego es una corriente con bola de hierro que nos ancla en la dimensión física y bloquea nuestra conexión con el crecimiento espiritual. Sin embargo, es solamente en el ámbito espiritual que la verdadera dicha y plenitud pueden ser encontradas.
Acción:
Este Nombre trae la mayor de todas las libertades: la fuga de los deseos basados en el ego, inclinaciones egoístas y la mentalidad del “yo primero”.
En vez de eso usted logra las dádivas verdaderas y duraderas de la vida - familia, amistad y plenitud.
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